Futuro en tránsito. Fanatismo.
El abogado Rodrigo Uprimny define al fanático «no solo por lo que idolatra y está dispuesto a defender, sin importar el costo, sino también por lo que odia y está dispuesto a combatir, igualmente sin importar el costo»; el filósofo Jorge Giraldo Ramírez en su ensayo afirma que nadie describe su propia conducta como intolerante, sectaria y violenta, y en vez de eso se define a sí mismo como alguien que tiene firmeza, entereza, carácter y personalidad; y la escritora Melba Escobar nos señala que fantasear o imaginar no es tiempo perdido. Es más bien el momento de darle al pensamiento la libertad de jugar con otras posibilidades y evitar así caer en el fanatismo.
Posibles usos Pedagógicos:
Encuentro de jóvenes con posturas diferentes. La idea es enseñarles de qué se trata el fanatismo y el por qué es negativo que entren en fanatismos de cualquier tipo, pues limitan su capacidad de ser tolerantes y respetuosos con los demás. Para poner en práctica lo que aprendieron, se les realiza una invitación de «tomémonos un tinto y un tiempo para discutirlo», para lo cual se divide a los jóvenes en grupos, en pos de representar una salida de amigos a tomar café, donde podrán compartir sus ideas en relación con el tema político, y con la guerra, particularmente de Colombia. No será un debate para señalar quién tiene la razón: al contrario, potenciando el diálogo y el reconocimiento de la diversidad de pensamientos, los jóvenes se escucharán, comentarán y cuestionarán libremente sobre lo que piensan los demás y también se cuestionarán a sí mismos, produciendo reflexiones sobre sus ideas, en aras de construir más conocimiento. Todo por el intento de no caer en fanatismos irracionales y para que no traten nunca de imponer su pensamiento sobre el de los demás.